La anorgasmia es un problema que puede llegar a ser muy común, sobre todo en mujeres. Si has estado indagando sobre este término, te interesa conocer más de dicho trastorno y quieres ponerle solución, conociendo sus causas principales, aquí te vamos a dar toda la información detallada sobre la anorgasmia.
Qué es la anorgasmia o la ausencia del orgasmo femenino
Se dice que la anorgasmia es la dificultad que tiene una persona de lograr un orgasmo, incluso cuando la estimulación sexual es directa. Esto crea un grave problema a nivel mental, puesto que es capaz de generar estrés, agobio por no poder culminar el acto sexual pudiendo llegar a interferir en las relaciones de pareja.
Los orgasmos, tal y como lo conocemos pueden variar notablemente en intensidad, pudiendo ser algo más leves, en casos en los que la estimulación o la excitación no sea del todo la más deseada, como también ser muy fuerte, cuando se ha estimulado correctamente a la persona y la excitación alcanza grandes cotas de placer. Sin embargo, cuando alguien tiene este trastorno, ocurre que no puede sentir ni el más leve de los orgasmos, quedando en todo momento en la meseta del placer, el cual, con el tiempo puede disminuir considerablemente o no llegar a esta etapa por no sentirse a gusto o simplemente saber que no va a conseguir llegar al clímax. Existen muchos tipos de anorgasmia o ausencia de orgasmos femeninos, y nosotros queremos comentarte los más habituales.
En primer lugar, existe la anorgasmia crónica o que ocurre desde toda la vida. Tal como su nombre nos indica, ocurre cuando nunca se ha sentido un orgasmo, por mucha excitación o estimulación se haya podido tener.
Después de este, se encuentra la anorgasmia adquirida, que es aquella que ocurre cuando anteriormente si habías disfrutado del sexo, pero que, por una causa u otra, las cuales te explicaremos más adelante, has dejado de sentir el clímax.
Finalmente existe un tipo de anorgasmia que se llama circunstancial y como podemos imaginar, se trata de la ausencia de orgasmos en según qué momentos. Por ejemplo, hay personas que, antes de estar con una pareja no habían sentido nunca un orgasmo pero al cambiar de persona, ha empezado a sentirlos. De la misma manera, se puede llegar al orgasmo con sexo oral o incluso masturbándose, pero si hablamos de otras técnicas o incluso posturas se hace imposible.
Causas de la anorgasmia
Son varias las causas que pueden hacer que sufras una anorgasmia, en el siguiente listado vas a encontrar las más habituales, clasificadas por causas físicas y por causas psicológicas, por lo que si piensas que sufres ausencia del orgasmo y localizas algunas de las causas en ti, será momento de buscar un remedio o tratamiento para volver a disfrutar de tus orgasmos.
Causas físicas de la anorgasmia
Entre las principales causas físicas se encuentran diferentes enfermedades, entre ellas las más comunes son la esclerosis múltiple como también el Parkinson, puesto que son trastornos que afectan directamente al bienestar físico y mental de la persona, por lo que pueden llegar a complicar la aparición del orgasmo.
También puede ocurrir que, por motivos ginecológicos, ya bien sea porque se ha sufrido una cirugía en los genitales, o incluso si se ha tratado contra el cáncer puede desembocar en esta afección. En estos casos suele ocurrir que no solo no se disfruta del clímax, sino que además puede doler.
Los medicamentos, el alcohol y el tabaco pueden desencadenar en periodos en los que no se sienta placer al tener relaciones sexuales. Esto es muy común en personas que siguen un tratamiento de según qué tipo de fármaco que hacen que inhiban la producción de serotonina, como también que modifican la presión arterial, haciendo que la sangre no llegue correctamente a tus genitales.
Causas psicológicas de la anorgasmia
Al igual que existen causas físicas, también están los de carácter psicológico, que pueden llegar a afectar de igual manera a la consecución del orgasmo. La depresión o la ansiedad pueden afectar negativamente a la sensación que se produce al excitar el cuerpo y al estimularlo, por lo que por mucho que pueda estimular tus zonas erógenas, es casi imposible que se produzca el clímax, puesto que la mente no va a permitirlo.
Si tienes la autoestima baja, no te sientes bien con tu propio cuerpo, puede ocurrir que no te sientas lo suficientemente feliz y estas preocupaciones repercutirán en tu apreciación del placer, puesto que, incluso si te estás masturbando, tendrás en mente la imagen negativa de tu cuerpo. Para eliminar esto lo que debes conseguir es erradicar la sensación de negatividad y conseguir mejorar tu autoestima.
Existen personas que, por motivos personales, culturales o religiosos ven que disfrutar del sexo es algo perverso o incluso malo, por lo que no llegan a vivir plenamente su sexualidad, repercutiendo en la calidad de sus orgasmos.
Anorgasmia relativa
Aunque ya hemos hablado de la anorgasmia relativa o circunstancial, queremos incluirla para comentar una de las causas habituales por las que no ocurre el orgasmo, y es que a veces no somos conscientes de que la persona con la que estamos no nos atrae, no llega a excitarnos como debería o peor aún, la comunicación entre los dos es defectuosa y no llega a cumplir su función en las relaciones sexuales, consiguiendo que sea un muro en ocasiones infranqueable para lograr un orgasmo. Para eliminar esta sensación, lo ideal es que la pareja empiece a conocerse en el terreno sexual, se hable y fomente la conexión entre los dos, de esta manera, la mente y también el cuerpo se relaja y se consigue que el orgasmo llegue con más facilidad, aunque también requiere de mucha práctica y diferentes sesiones en las que es primordial conocer el propio cuerpo y el de la pareja.
Anorgasmia secundaria
Para finalizar con toda la información de la anorgasmia femenina, comentarte que también se habla de la anorgasmia primaria y secundaria. Cuando un especialista te comenta que tienes anorgasmia primaria, lo que viene a referirse es que nunca has disfrutado de un orgasmo, algo que le suele ocurrir a un 30% de la población femenina del planeta, mientras que la anorgasmia secundaria es aquella que ocurre en ciertos momentos de la vida, ya bien sea porque se esté tomando medicamentos, estés pasando una etapa en la que bebes o fumas mucho, tienes nervios, estás tensa o depresiva, como también la llegada de la vejez, puesto que algunas mujeres, a causas del envejecimiento del cuerpo, empiezan a perder la facilidad con la que tenían orgasmos, un problema muy común que puede llegar, en algunos casos, a tratarse y a remediarse, pero hace falta la ayuda de especialistas en esta temática.