El orgasmo es ese pico de placer producido por una excitación sexual. Muchos expertos lo catalogan como una descarga enorme energía y de tensión que se ha ido acumulando y que consigue ese culmen o clímax de placer. En esta guía completa te vamos a contar todo lo que tienes que saber sobre el orgasmo masculino, algunos datos curiosos y también cómo llegar a controlarlo para alargar la sensación.
Qué es el orgasmo masculino
Según la definición de orgasmo en los hombres, podemos decir que se trata del pico de placer en el género masculino y que es producida por una gran excitación sexual. Según diferentes estudios, se produce en cinco fases o estadios, denominándose DEMOR por las iniciales de las palabras de cada etapa del orgasmo.
En primer lugar, tendremos el deseo, siendo este antes de la excitación. En el deseo juegan especial importancia los sentidos, ya bien sea una mirada de una persona que les atrae, una fragancia que les estimula, un contacto ya bien sea con la mano o con el cuerpo o incluso unas palabras, todo esto puede desembocar en un deseo de estar con dicha persona y practicar sexo.
La segunda etapa es la denominada excitación siendo la más detectable, puesto que es cuando se produce la erección del pene. La sangre empieza a fluir hacia los genitales masculinos haciendo que este crezca en tamaño y también que se endurezca. En los testículos también se puede apreciar puesto que el escroto, es decir la bolsa que los protege se tensa.
Antes del orgasmo se habla del estadio meseta, en el que el placer es constante, llegando gran cantidad de sangre a los genitales, subiendo las pulsaciones y también la respiración, que se acelera. Los músculos se van tensando, sobre todo los que se encuentran en los glúteos como en los muslos y el pene se va haciendo más grande.
El orgasmo en el hombre es más visual puesto que con este clímax también llega la eyaculación. Aunque como podrás leer en otros tipos de orgasmos masculinos y guías, existen personas que tienen el denominado orgasmo seco, que es aquel que se produce sin que se llegue a eyacular, teniendo una sensación similar al convencional. La duración del orgasmo en el hombre es más corta que en la mujer, siendo rara vez de más de 30 segundos. En la acción del orgasmo se pone en marcha un proceso por el que, por medio de contracciones del suelo pélvico, pero también de la próstata y de las vesículas seminales se consigue expulsar el semen al exterior.
La última fase de la denomina resolución y es también denominada de recuperación, puesto que es cuando el cuerpo vuelve a su estado de reposo, en el que las pulsaciones vuelven a su nivel habitual. En esta etapa lo que se destaca es que el hombre es prácticamente imposible volver a tener un orgasmo, y según la edad de la persona puede tardar de un cuarto de hora a incluso un día entero para recuperarse.
Qué es el orgasmo anal masculino
El orgasmo anal masculino es uno de los principales tabúes de la sociedad, aunque aquellos hombres que se han atrevido a disfrutarlo cuentan que es una de las mejores experiencias que han tenido y que vuelven a practicarlo. El orgasmo anal se suele relacionar con las relaciones homosexuales, sin embargo, esto es erróneo, puesto que se trata de una manera más de experimentar con el placer del cuerpo.
Para alcanzarlo se necesita estimular el punto G masculino, o como muchos lo denominan, el punto P, puesto que se trata de una estimulación directa de la próstata. Para poder alcanzar mejor este punto lo que necesitamos es llegar a él y la mejor manera de hacerlo es por el ano. Cuando introducimos el dedo en el ano masculino, se nota una pequeña protuberancia siendo esta la próstata. Al estimularla, la excitación es mucho más intensa que con una estimulación del pene, consiguiendo que el orgasmo sea simplemente espectacular.
Hay que saber que no todos los hombres se dejan tocar esta zona y mucho menos introducir un juguete erótico o un dedo por detrás, por lo que, si la persona quiere experimentar estas sensaciones, deberá de estar de acuerdo, necesitando mucha comunicación con la pareja para que, si en algún momento siente dolor, se pueda cambiar de juegos o estimulaciones. Es algo que para muchos necesita varias sesiones pero que, una vez que lo ha disfrutado, querrá repetir.
Cómo alargar el orgasmo masculino
Como hemos dicho con anterioridad, el orgasmo masculino suele tardar menos que el femenino, sin embargo, existen técnicas que ayudan a alargar esta sensación y que se deben de practicar varias veces al día durante toda la semana para que se pueda apreciar mejor. Lo que se debe de realizar son actividades de contracción y relajación del suelo pélvico, como si estuvieras apretando o aguantando las ganas de ir al cuarto de baño.
Esto hay que realizarlo con mucha precaución y sin excederse, puesto que lo que estamos haciendo es ejercitar un músculo y si nos pasamos más de la cuenta, quizás lo que consigamos es el efecto contrario, acortar la sensación o en algunos casos sufrir disfunción eréctil, algo que seguro no quieres que pase. Una vez que hayas practicado verás que poco a poco el orgasmo se siente más intenso que anteriormente y que la sensación de placer también perdura.
Cómo controlar el orgasmo masculino
Uno de los problemas habituales en los hombres es la eyaculación precoz. Este trastorno puede llegar a producirse en ciertas etapas de la vida como por ejemplo en las primeras relaciones sexuales del hombre, como también en primeros encuentros con parejas que le excitan demasiado y que no pueden controlar esta sensación. En otras personas el trastorno puede ser mucho más grave, puesto que ocurre en todas y cada una de las relaciones sexuales y por lo tanto puede ser un gran problema tanto para esta persona, que siente que su autoestima se ve tocada, pero también la de la pareja que siente que no está disfrutando del sexo como debería.
Lo primero de todo para controlarlo es hablar con la otra persona, para que pueda comprenderte y ayudar en todo el proceso. Los ejercicios para controlar el orgasmo masculino son muy similares al de alargarlo, por lo que deberás de practicar todos los días para evitar este problema o al menos hacerlo más leve. Estas técnicas se las conoce como sexo tántrico y se relacionan con culturas orientales que han ido experimentando y comprobando que una vez que se ha entrenado el suelo pélvico como también la próstata, es más fácil detectar el clímax y controlarlo para tener el orgasmo en el momento que se prefiera, pudiendo disfrutar de un momento más intenso y lleno de placer.